En la cocina podemos aprovechar casi todos los restos de alimentos que generamos. La cuestión es conocer los trucos y recetas adecuados para cada ocasión. Hoy compartimos los consejos ganadores del reto 4 de la Operación #Nomesobra contra el desperdicio de alimentos.
Sofrito con sobras de ensalada…y 5 trucos más (Ganador). Fabiola Villalva Quintana
Truco 1. Si nos ha sobrado ensalada (lechuga, tomate, pepino…), podemos hacer un sofrito y añadir una lata de bonito en aceite. Este sofrito es perfecto para hacer empanadillas o para hacer bocadillos o sándwiches.
Truco 2: Cuando se cuece una verdura, no se debe tirar el agua puesto que es muy buena para hacer sopas o arroces.
Truco 3: Con la verdura vieja se puede hacer una buena sopa. Se corta muy fina, se añade zanahoria rallada y col. Se sofríe y al sofrito se le añade patata, perejil y orégano. Se sazona y se cubre con agua. Se deja cocer.
Truco 4. La parte verde del puerro se puede aprovechar, es comestible y tiene mucha fibra. Se puede añadir, cortada muy fina y rehogada, a una sopa o a un guiso de carne.
Truco 5. Una manzana vieja le da muy buen sabor a la sopa de calabaza. Para elaborarla, se corta la calabaza y la manzana en dados, se añade perejil fresco, una patata pequeña, sal albahaca y aceite de oliva. Se cuece todo junto y se pasa por el pasapuré para que tenga una consistencia más fina.
Truco 6. Para congelar alimentos y no consumir tanto plástico, se pueden aprovechar las bolsas enceradas de los cereales de desayuno.
Los nutrientes del aguacate, un rico semillero
Otro de los trucos finalistas tiene que ver con los aguacates. ¿Sabías que tiene infinidad de nutrientes, también para las plantas? Por eso, después de utilizarlo para tus ensaladas u otros platos, puedes aprovecharlo como tiesto para plantar semillas. Sus nutrientes alimentan a la semilla, que se convertirá en una planta y crecerá de forma impresionante.
Cáscaras de limón para hacer limpiador
Por último, el limón se puede usar como producto de limpieza. Tras utilizar la pulpa, vamos a aprovechar las mondas para elaborar un limpiador. Es tan sencillo como dejarlas macerar con vinagre de alcohol durante 15 días. Después, estará listo para utilizar en cualquier superficie.