Alumnos, alumnas, padres, madres y profesores del CRA Alto Nalón festejaron el pasado 28 de marzo, en la escuela de El Condado, su acreditación Triple Erre, un reconocimiento que certifica el máximo nivel de compromiso y de aprovechamiento de recursos en la Red de Escuelas por el Reciclaje.
El acto, que contó con la presencia del viceconsejero de Medio Ambiente del Principado de Asturias, Benigno Fernández Fano; el gerente de COGERSA, Santiago Fernández; la concejala de Educación y Cultura de Laviana, Inés García, y la concejala de Cultura de Sobrescobio, Tensi Carmona, comenzó con la actuación del Mago Serres, que hizo las delicias de grandes y pequeños con su espectáculo ‘La magia de las tres erres’, donde las palabras reducir, reutilizar y reciclar cobraron un especial sentido.
Tras el espectáculo, los representantes institucionales se dirigieron a los más pequeños para felicitarles por el enorme trabajo y la encomiable labor realizada por toda la comunidad educativa. Tras la entrega de la placa acreditativa de la Triple Erre, las autoridades, junto con la coordinadora de la RER del CRA, Rosario Carvajal y la directora del centro, Mini Menéndez, realizaron una visita guiada explicando las acciones realizadas por los 126 alumnos que componen las cuatro escuelas: Condao, Villoria, Entralgo y Sobrescobio.
Una exposición en la que no faltaban materiales didácticos, como las tablas de multiplicar elaboradas con tapones; juegos de ingenio como el solitario con tapones y canicas, o una muestra de las creaciones del programa la ‘Escuela va al mercau’, con jarrones, collares o monederos hechos con bolsas de plástico que pondrán a la venta el próximo 10 de mayo en el mercado de Laviana y cuya recaudación irá destinada a un fin solidario, en este caso a la Asociación de Familias de Niños con Cáncer del Principado de Asturias “Galbán”.
Solidario es también el proyecto estrella de este curso: la campaña de reciclaje de teléfonos móviles con la que aportan su granito de arena al Instituto Jane Goodall para la protección de los sistemas africanos.
Y para celebrar el fruto de todo ese trabajo, los más pequeños se trasladaron al polideportivo de Rioseco para disfrutar de una jornada de juegos tradicionales reciclados: les chapes, el aru, la carrera de lecheres, el tiru cuerda o los coches de pedales, pusieron el punto final a esta jornada festiva.